Puede existir la concepción errónea de que el cultivo de cannabis termina una vez se ha recogido la cosecha. Nada más lejos de la realidad, pues después de garantizar un suministro preciso de nutrientes esenciales, así como de llevar a cabo los tratamientos básicos durante los diferentes ciclos vitales de las plantas, es necesario secar y curar las flores de manera que se mantengan y potencien sus principales cualidades organolépticas y psicoactivas. Igual de importante es almacenar posteriormente el material, por lo que en este artículo se explica cómo conservar la marihuana de manera fácil y segura.
La conservación de marihuana, un proceso esencial
El primer paso para conseguir un almacenamiento de cogollos de cannabis totalmente satisfactorio es el curado de las flores. Este proceso que tiene lugar después del secado, se caracteriza por requerir las mismas condiciones ambientales que la posterior conservación de las flores.
Un lugar que esté oscuro y fresco, así como el empleo de botes de cristal o frascos de vidrio, los cuales se deben llenar hasta el 75% de su capacidad, dejando una mínima cantidad de aire en la parte superior. En la primera semana, se deben abrir estos recipientes varias veces al día, mientras que durante las siguientes semanas se reducirá esta labor a una vez cada pocos días.
Una vez los cogollos estén adecuadamente curados, es conveniente seguir algunas pautas básicas para mantener las flores frescas durante un largo periodo de tiempo, evitando que se vea comprometido el contenido de cannabinoides y terpenos, así como la proliferación de hongos por unos valores higrométricos inadecuados. Para esta labor, se puede conservar la marihuana tanto en recipientes herméticos como envasada al vacío.
Consejos para saber cómo conservar la marihuana
A continuación, se detallan una serie de consejos y recomendaciones para conseguir una óptima conservación de los cogollos de marihuana. Después del secado y curado, este proceso es fundamental para mantener las principales cualidades organolépticas y psicoactivas de cada variedad meses después de haber sido cosechada la producción.
Utilizar botes de cristal con cierre hermético
La manera más habitual de conservar marihuana es utilizando botes de cristal totalmente herméticos. Estos recipientes deben estar repletos de flores, pero no totalmente ajustados y aplastados, puesto que esto provocaría un menor contenido de resina. Por otro lado, tampoco debe quedar demasiado espacio ya que desembocaría en la sequedad de las flores.
El tamaño no debe ser muy grande, ya que puede permitir que una mayor cantidad de aire incremente el riesgo de que la marihuana se degrade. Se recomienda un tarro con tapa de rosca que dé 3 vueltas para asegurar un mayor hermetismo. Como se ha comentado, es aconsejable que el material sea cristal o vidrio, ya que el plástico puede aumentar la humedad provocando que el cannabis sude y termine por secarse más rápidamente.
Almacenar en un lugar fresco y oscuro
De manera general, para almacenar en perfecto estado los cogollos de marihuana debe seguir la siguiente indicación: conservar en un lugar fresco, seco y oscuro. Para ello, es necesario atender a diferentes factores asociados a la temperatura, humedad y a la exposición a la luz directa del sol.
En este sentido, una de las labores más importantes es guardar los recipientes herméticos en un lugar fresco, en el que la temperatura oscile entre los 20 y 25 ºC. Es imprescindible mantener esta temperatura, puesto que el calor puede degradar terpenos y cannabinoides, mientras que en el caso contrario, por debajo de estos grados centígrados, tiene lugar una descarboxilación más lenta, que repercute en una menor contenido de THC.
Asimismo, es igual de trascendental conseguir una humedad relativa aproximada del 60%, valor que permite mantener sabores, aromas y efectos, al mismo tiempo que evita la aparición de hongos, moho y otros patógenos. Del mismo modo, el material debe estar fuera de la exposición de la luz procedente del sol (rayos UVA), ya que puede dañar tanto el contenido de terpenos como de cannabinoides.
Mantener limpia la sala de conservación
Por otro lado, también es recomendable extremar la limpieza en el lugar donde están almacenados los cogollos. Una correcta higienización de esta sala es clave para mantener la calidad de las flores, siendo necesario eliminar el polvo que cubre los botes herméticos, así como limpiar los muebles y fregar el suelo, sobre todo cada vez que se entre en dicha habitación.
Envasar al vacío o guardar cogollos en cajas de madera
Normalmente, conservar cogollos de marihuana es una labor que se lleva a cabo durante un tiempo aproximado de varios meses, aunque también es posible almacenarla durante años sin que pierda ningún ápice de sus sabores, aromas y efectos. Para ello, la técnica más eficiente es envasar al vacío las flores en bolsas de plástico específicas, la cual permite eliminar el exceso de humedad y reducir el nivel de oxígeno.
Esta técnica es ideal para cultivadores comerciales, pues garantiza la conservación de las cualidades de cada variedad, así como una total prevención ante la aparición de patógenos como moho y otros hongos, además de evitar la sequedad de las flores. Asimismo, esta técnica permite ahorrar espacio en el almacenamiento de cogollos de marihuana, así como transportarla con mayor facilidad.
Por otro lado, también se pueden conservar en cajas de madera, aunque están diseñadas principalmente para el proceso de curado de los cogollos. Se pueden guardar en estos recipientes por un breve periodo de tiempo, siendo las más utilizadas las que están fabricadas con madera de cedro, que se caracterizan por una baja porosidad. También, algunas de ellas llevan incorporado un higrómetro, que ayuda a controlar con mayor precisión la humedad dentro de la caja.
Congelar los cogollos de marihuana es posible
Saber si se pueden congelar los cogollos de marihuana una vez estén adecuadamente secados y curados, es una de las preguntas más recurrentes de un gran número de cultivadores, sobre todo los menos experimentados. La respuesta es sí y, lógicamente, durarán mucho más tiempo, pero la calidad se verá notablemente comprometida. Además, solo se recomienda realizar este proceso en una única ocasión, puesto que en repetidas ocasiones puede incrementar dicha reducción de la calidad organoléptica y psicoactiva. Por ello, se recomienda para períodos largos el envase al vacío de los cogollos.
Cómo conservar la marihuana para obtener cogollos de gran calidad
Conservar marihuana no es un proceso complicado, pero sí necesita de paciencia y precisión para que las flores sean de la mejor calidad posible y, por lo tanto, los sabores, aromas y efectos sean los esperados de cada variedad. Por ello, debe extremar los cuidados, utilizar el equipamiento adecuado y esperar el tiempo necesario para disfrutar de un material cannábico excepcional.