La categorización del cannabis en dos especies, índica y sativa, es una práctica común en la industria de la marihuana. Aunque ambas especies pertenecen a la misma familia, Cannabaceae, y contienen los mismos compuestos químicos como THC y CBD, difieren en su apariencia, aroma, efectos y uso terapéutico.
Diferencias principales entre índicas y sativas
Para las personas que no están en contacto con estas plantas habitualmente, puede ser complicado distinguirlas a simple vista. Sin embargo, tienen características que las identifican fácilmente.
Características básicas de marihuana índica
Las plantas índicas son más pequeñas y densas, con hojas anchas y tallos gruesos. Se originaron en Asia Central y Afganistán y se cree que se cultivaron por primera vez por sus propiedades medicinales. Los efectos de las cepas índicas se describen como relajantes, calmantes y sedantes, lo que las hace ideales para tratar el dolor, la ansiedad y el insomnio.
Características básicas de la marihuana sativa
Por otro lado, las plantas sativas son más altas y delgadas, con hojas y tallos más delgados. Se originaron en áreas tropicales como México, Colombia y Tailandia. Las cepas sativas se describen como energizantes, estimulantes y creativas, lo que las hace ideales para tratar la depresión, la fatiga y el estrés.
Aunque la mayoría de las cepas disponibles en el mercado hoy en día son híbridas, que son una combinación de índica y sativa, la distinción entre las dos especies sigue siendo importante para los cultivadores. Con una mejor comprensión de las diferencias entre índica y sativa, los consumidores pueden elegir la cepa adecuada para sus necesidades y preferencias.
Indica vs Sativa: una mirada detallada
Para saber distinguir definitivamente las índicas de las sativas, es necesario explorar la historia y origen, características físicas, composición química, efectos y usos médicos de ambas cepas.
Historia y Origen
El cannabis índica se originó hace miles de años en las regiones montañosas de la India, Pakistán y Afganistán, mientras que el cannabis sativa se originó en las regiones ecuatoriales de América del Sur, Centroamérica y el sudeste asiático. Aunque pertenecen a la misma familia, la necesidad de adaptarse a diferentes climas para sobrevivir, las ha obligado a cambiar interior y exteriormente.
Los primeros botánicos en clasificar las diferentes especies de cannabis fueron los europeos Linneo y Lamarck en el siglo XVII, a pesar de la multitud de opiniones acerca la manera de agrupar estas plantas por su compleja taxonomía.
Características Físicas
Las plantas de cannabis índica se desarrollan de una forma más compacta y con menor estatura, siendo sus tallos y hojas más anchos y densos. Al contrario, la variedad de cannabis sativa crece más espigada, con una distancia internodal mayor. Sus tallos y hojas son más delgados, al igual que sus flores, que se estiran más y, por lo tanto, su estructura es más aireada. Esto les proporciona una protección extra ante los hongos, los cuales son más habituales en los cogollos índicos por ser más apretados.
Asimismo, cabe apuntar que el ciclo de vida de las índicas suele ser más corto gracias a la duración de su periodo de floración en comparación a las sativas. También suelen conseguir cosechas algo mayores.
Por otro lado, las plantas híbridas son una mezcla de ambas genéticas. Aun así, en ocasiones es posible diferenciar la predominante.
Diferenciar las variedades de marihuana por sus hojas
Las características de las hojas de marihuana están estrechamente relacionadas con los patrones de crecimiento de la planta. Las hojas de las índicas cuentan con anchos foliolos, son más pequeñas y de un verde más intenso. Por su parte, las hojas sativas son más alargadas, de mayor estatura y un verde algo menos intenso, por la menor concentración de clorofila.
También difieren en el número de foliolos, las índicas suelen desarrollar entre 5 y 9; mientras que las sativas pueden llegar a los 13.
Composición Química
Ambas cepas contienen varios componentes químicos, entre los que destacan los flavonoides, los terpenos y los cannabinoides, estos últimos los más conocidos por incluir el THC y el CBD.
Flavonoides
Los flavonoides son responsables de los colores de muchas flores, frutas y verduras, además de tener varias funciones biológicas y poseer, en ocasiones, propiedades beneficiosas para la salud. Los más abundantes en las variedades de marihuana son las chalconas, las flavonas, los isoflavonoides, las flavanonas, las antoxantinas y las antocianinas.
Terpenos
Los terpenos son compuestos orgánicos responsables de los aromas y sabores característico de cada variedad de marihuana. También puede tener efectos fisiológicos y parcialmente beneficiosos para la salud. Destacan:
- Mirceno. Aroma a tierra, musgo y clavo. Puede tener propiedades sedantes y relajantes.
- Limoneno. Ofrece un aroma cítrico, como a limón o naranja, y se ha asociado con efectos eufóricos y mejora del estado de ánimo.
- Linalool. Tiene un aroma floral, similar al de la lavanda, y se cree que posee propiedades relajantes y ansiolíticas.
- Cariofileno. Aporta un aroma especiado y terroso, como el de la pimienta negra, y podría ser antiinflamatorio.
- Pineno. Aroma a pino, como su nombre indica, y puede tener efectos de alerta y mejora de la memoria.
- Terpinoleno. Su aroma también recuerda al pino, además de al cilantro. Posiblemente sea relajante y sedante.
Cannabinoides
Son los responsables de los efectos psicoactivos y medicinales de las plantas de marihuana. Hasta la fecha se han identificado más de cien cannabinoides en la planta, aunque los más conocidos y estudiados son el delta-9-tetrahidrocannabinol (THC) y el cannabidiol (CBD). El resto son menos abundantes:
- Delta-9-Tetrahidrocannabinol (THC). Principal compuesto psicoactivo del cannabis responsable de la sensación de “colocón” o euforia.
- Cannabidiol (CBD). No es psicotrópico, sino que se asocia con propiedades medicinales: antiinflamatorio, analgésico, ansiolítico y antiepiléptico, entre otros. El CBD ha ganado popularidad en la medicina y se usa en productos como aceites y tópicos para tratar diversas afecciones médicas.
- Cannabigerol (CBG). A menudo se le llama el «padre de los cannabinoides» porque es un precursor de otros cannabinoides. Se ha investigado por sus posibles propiedades antiinflamatorias y neuroprotectoras.
- Cannabichromene (CBC). Se cree que es antiinflamatorio y analgésico. Puede contribuir al efecto séquito, en el que varios cannabinoides trabajan juntos para potenciar sus beneficios.
- Cannabinol (CBN). Aunque no es psicoactivo, puede tener propiedades sedantes y posiblemente contribuir a un mejor sueño.
Usos medicinales y efectos de las índicas y sativas
Uso terapéutico
Tanto las cepas índicas como las sativas poseen efectos terapéuticos. La índica se relaciona con propiedades relajantes y sedantes, lo que la hace útil para tratar la ansiedad, el insomnio y el dolor crónico. También se ha usado para aliviar la inflamación y reducir el vómito y las náuseas.
Por otro lado, la sativa es conocida por sus efectos energizantes y estimulantes, lo que la hace útil para tratar la depresión y la fatiga. También puede ser utilizada para aumentar el apetito y reducir las náuseas.
Además, los terpenos también pueden contener efectos terapéuticos.
Efectos secundarios
Utilizar las variedades de cannabis en medicina es ilegal en muchos países por sus efectos secundarios. Los más leves son la boca seca, mareos, somnolencia y aumento del apetito. Pero también hay que lidiar con la parte psicotrópica que altera la percepción y el resto de sentidos. Además, un uso frecuente puede causar tolerancia y adicción, así como afectar a la memoria, a la concentración y a la coordinación. Adicionalmente, tanto las flores índicas como las sativas pueden interferir en las propiedades de los medicamentos.